Uno de los principios más importantes y difíciles de todo el proceso comunicativo es el saber escuchar. La falta de comunicación que se sufre hoy día se debe en gran parte a que no se sabe escuchar a los demás. Se está más tiempo pendiente de las propias emisiones, y en esta necesidad propia de comunicar se pierde la esencia de la comunicación, es decir, poner en común, compartir con los demás. Existe la creencia errónea de que se escucha de forma automática, pero no es así. Escuchar requiere un esfuerzo superior al que se hace al hablar y también del que se ejerce al escuchar sin interpretar lo que se oye. Pero, ¿qué es realmente la escucha activa?
La escucha activa significa escuchar y entender la comunicación desde el punto de vista del que habla. ¿Cuál es la diferencia entre el oír y el escuchar? El oír es simplemente percibir vibraciones de sonido. Mientras que escuchar es entender, comprender o dar sentido a lo que se oye. La escucha efectiva tiene que ser necesariamente activa por encima de lo pasivo. La escucha activa se refiere a la habilidad de escuchar no sólo lo que la persona está expresando directamente, sino también los sentimientos, ideas o pensamientos que subyacen a lo que se está diciendo. Para llegar a entender a alguien se precisa asimismo cierta empatía, es decir, saber ponerse en el lugar de la otra persona.
Tras hacer el test de escucha activa y analizar los resultados, he llegado a las siguientes conclusiones:
· Escuchar sin interrumpir: según el resultado (4) me pongo a hablar por encima de la otra persona, me aconseja que deje terminar a las personas antes de empezar a hablar.
· Escuchar prestando el 100% de atención: en esta capacidad el resultado que he obtenido ha sido cuatro, y por lo que dice la tabla de resultados si logro no distraerme lograré contactos personales más satisfactorios.
· Escuchar más allá de las palabras: en este apartado mi resultado, 4, que me doy cuenta de lo que sienten los demás pero le doy más valor al mensaje explícito.
· Escuchar incentivando al otro a profundizar: en esta habilidad, como en las otras, mi resultado ha sido cuatro, por lo que se puede decir que soy un oyente activo pero hago todo lo posible.
Al ver estos resultados me planteé cómo podía mejorarlos para poder desarrollar una mejor escucha activa, ya que es una habilidad muy importante a la hora de desempeñar nuestro rol profesional. Para mejorarla encontré una serie de habilidades que fomentan la escucha activa:
· Mostrar empatía
· Parafrasear
· Emitir palabras de refuerzo o cumplidos
· Resumir
Vuestro enfermero y amigo
Victor José Garrido Torrente
No hay comentarios:
Publicar un comentario